Por: Silvio Alberto Salazar E.
«Estamos en los albores de la época más agradable del año, en el ambiente se siente un aire deferente al vivido durante todo el tiempo anterior. Cada ocho días el alborozo va en aumento, llegará la Navidad y haremos un pare en el camino para recibirla. No olvidemos que la Navidad es comprender, es despertar la sensibilidad y ponerse de verdad en el lugar de los demás para poder entenderlos. La navidad es escuchar el corazón, dejarse guiar por la bondad y tratar a todos con una amorosa solicitud. Si tú quieres vivir una Navidad especial y diferente elige perdonar de corazón, pedir perdón y perdonarte a ti mismo. Celebremos una nueva llegada de José y María a Belén. Ellos no llegaron en una limosina, o en avión privado; no se hospedaron en una lujosa clínica, o en la suite del mejor hotel. En ningún centro comercial compraron todo lo necesario para el bebé y mucho menos contaron con un baby shower lleno de costosos regalos. Fue en un establo maloliente, oscuro y frío donde nació el rey del universo, pero allí todo era bello porque reinaban el amor y la esperanza, brillaba la fe y estaba Dios» (Notas reflexivas en parte del sacerdote Gonzalo Gallo)
Amigos de Fredonia, hagan de la Navidad lo mejor, no se destruyan y no den rienda suelta a sus ambiciones personalistas, rodéense de los suyos y bríndeles lo mejor, su compañía y su buen comportamiento, bailen con mesura, endulcen su ser con poco almíbar, los excesos en el licor llevan a la perdición.
Disfruten de las fiestas de fin de año con una agradable disposición de contento. En el fondo de sus corazones conserven los mejores regalos para sus seres queridos, especialmente para sus hijos, esposa y familiares cercanos.