El pasado 23 de febrero se pensaba realizar en Amagá una audiencia pública donde se nos iba a informar a los amagaseños de la expedición de seis títulos, tres de ellos de minería de oro, yo fui enfático y le manifesté a la señora secretaria de Minas de la Gobernación de Antioquia, a la doctora Dora Balvín, que en Amagá no permitíamos la minería de oro, y es por eso que la cancelaron.
Afirma Wilser Darío Molina alcalde de Amagá, frente a la pregunta sobre si el municipio se uniría al bloque del Suroeste: Támesis, Jericó, Urrao, Titiribí, Jardín, Betulia, Tarso, Concordia, Salgar, Pueblorrico y Valparaíso, que a través de acuerdos municipales le han dicho ‘No’ a la minería de metales.
El mandatario sostiene que Amagá seguirá con su vocación carbonífera y agrícola, pero aclara que la decisión solo sería para lo que tenga que ver con exploración y extracción de metales:
Cajamarca cometió un error de decir ‘NO’ a todo tipo de minería y lo que hicieron con esto fue excluir a la minería subterránea, la de canteras…lo que nosotros decimos es: sí a la minería de carbón, sí a la formación y formalización, sí a la extracción de arenas, arcillas, porque tenemos más de 15 alfareras en el municipio.
El alcalde se refiere al caso del municipio de Cajamarca (Tolima) donde en marzo del 2017, el 97,92% de los votos en la consulta popular fue por el ‘NO’ a la minería.
Frente al mecanismo de participación ciudadana, Wilser Darío Molina explica que le apostarán a la consulta popular:
Porque los Concejos no tienen competencia para prohibir el desarrollo de la minería a través de la titulación, pero sí mediante una consulta popular.
Vale la pena recordar que en octubre de 2017 el Ministerio de Hacienda anunció que no entregará dinero de la Nación para financiar las consultas populares, y que de ahora en adelante, el dinero tendrá que salir de los bolsillos de las alcaldías y gobernaciones correspondientes.
Sobre cómo va el proceso, el alcalde Wilser Darío Molina dice que:
Estamos avanzando en el tema con el área jurídica porque tenemos que contar con el Concejo Municipal para la aprobación de este mecanismo y así elevarlo a la Registraduría Nacional para que nos permitan desarrollarla, y que sea el constituyente primario que es el pueblo, el que se manifieste y ejerza su derecho a decir ‘NO’ a la minería de oro.
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