Según el último informe Boletín de salud mental Patología dual en Colombia del Ministerio de Salud de fueron 45.424 los casos de patología dual atendidos en Antioquia de 2009 a 2017. Esta cifra representa el 26 por ciento de los casos totales en el país.
Una persona es diagnosticada con patología dual cuando además de padecer un trastorno mental, también sufre una adicción a sustancias psicoactivas diferentes al tabaco.
Mientras que la depresión mayor, el trastorno negativista desafiante, el estrés postraumático, la fobia específica y el déficit de atención son los trastornos mentales más comunes en esta patología; el alcohol, la marihuana, la heroína, la cocaína y sus derivados fueron las sustancias que más consumían las personas afectadas.
Maria Andrea Ramírez, magíster en Psicología Clínica de la Universidad CES, explica que esto se debe quienes tienen trastornos mentales son más propensas a caer en la adicción de las sustancias psicoactivas porque «se ocasionan por diferentes cambios en el cerebro que te hacen más vulnerable. Entonces así trates de que sea un consumo ocasional, te vuelvas adicto con facilidad».
Asimismo, muchas personas caen en la adicción porque sienten que el consumo de drogas les da un alivio de su trastorno y buscan esa calma constantemente. Como dice Ramírez, es una manera de «automedicarse».
Pero también es importante señalar que la relación va en ambos sentidos, porque hay gente que genéticamente es propensa a desarrollar trastornos mentales y el consumo puede disparar esa vulnerabilidad genética que estaba ahí guardada.
«Si lo estamos hablando del punto de vista de la adicción a las sustancias psicoactivas, quiere decir que hay dos trastornos mentales conviviendo y este híbrido puede dificultar su tratamiento y, más importante aún, puede empeorar uno de los dos. Si es depresión lo puede poner más triste, si es esquizofrenia puede empeorar las alucinaciones y terminar lastimando a los que los rodean o a ellos mismos», concluye.
