Al llegar al final de este año, desde el Periódico Regional EL SUROESTE hacemos un llamado a reflexionar sobre los valores que definen nuestra región y a reafirmar nuestro compromiso con el campo, la vida y las historias que tejen nuestra identidad. Este año marcamos dos décadas de existencia, un hito que celebra no sólo la permanencia de un medio, sino la consolidación de una visión: ser un puente que conecta las voces, los sueños y las luchas de los 23 municipios del Suroeste antioqueño.
Cada historia que publicamos es una semilla plantada en el corazón de la comunidad. Yuri Milena Holguín, quien ha convertido los cafetales de Fredonia en una extensión de su hogar y su sueño, nos recuerda que el campo no es sólo el sustento de nuestra región, sino también el espacio donde florecen los encuentros, las risas y las esperanzas. Iniciativas como Sueños a Color en Concordia nos enseñan que el arte puede transformar vidas y espacios que posicionan a nuestra región como un referente cultural y turístico.
En un territorio donde la conexión con la tierra es parte esencial de nuestra identidad, ejemplos como el de don Hector en Venecia nos invitan a reconsiderar nuestra relación con la naturaleza. Su sueño de una finca donde se cultiven alimentos para la vida, nos recuerda la importancia de proteger y valorar el campo como un legado vital. Es en estos actos cotidianos de siembra y cuidado donde se gesta la verdadera sostenibilidad de nuestra región.
Sin embargo, también cerramos el año con la obligación de recordar y alzar la voz en rechazo a cualquier forma de violencia, especialmente hacia las mujeres. Los recientes actos que han enlutado a nuestro territorio no deben ser olvidados. Desde Fredonia hasta Andes, desde Angelópolis hasta Montebello, las movilizaciones en contra de las violencias y el cumplimiento de la Ley 1257 de 2008 son un recordatorio de que la paz se teje con justicia y dignidad.
Este año también nos permitió reflexionar sobre nuestra propia misión como medio. Hace veinte años, el periodista Álbaro Valencia Cano (1964 – 20016) fundó un periódico que comenzó narrando las historias de Amagá. Soñó con un periódico que no sólo informara, sino que diera voz a cada rincón del Suroeste. Su legado sigue vivo en cada ejemplar que circula gratuitamente, en cada publicación en internet, en cada historia compartida y en cada lector que encuentra en estas páginas una herramienta para participar activamente en su comunidad. Nuestra misión de democratizar el acceso a la información, de empoderar ciudadanos y ciudadanas, es el motor que impulsa nuestro trabajo. Seguiremos destacando la identidad y cultura de nuestra región, sin olvidar las problemáticas que nos desafían y los espacios de reflexión necesarios para construir juntos soluciones.
Este cierre de año es también un inicio. Sigamos sembrando futuro en el campo y en las mentes, sigamos construyendo un Suroeste lleno de vida, donde las montañas son testigos de nuestras historias y transformaciones. Que el 2025 sea un año para reafirmar nuestro compromiso con la verdad, con el desarrollo de nuestra región y, sobre todo, con la VIDA.