Conversamos con Marisol Suárez Roldán, coordinadora de participación, divulgación y comunicación pública de la formulación del Plan de Adaptación al Cambio Climático desde Salud Ambiental para Antioquia (PACCSA), sobre conceptos básicos para entender cómo esta crisis planetaria afecta y afectará la salud humana, qué hallazgos se han tenido en relación con esas afectaciones en el Suroeste y su relación con la justicia social.
La crisis climática se relaciona con la salud humana de manera directa e indirecta. Un ejemplo es cuando hay eventos climáticos extremos: lluvias muy intensas, inundaciones, deslizamientos o avenidas torrenciales que generan lesiones y muertes; en ese caso hay una afectación directa a la salud. Con el aumento de la temperatura global del planeta se alteran las temporadas de lluvia y sequía (lo que se llama normalmente invierno y verano) impactando por ejemplo a las cosechas: hace que se pierdan, que suban los precios y que la población vulnerable, aquella con necesidades básicas insatisfechas, ponga en peligro su seguridad alimentaria; esta es una afectación indirecta a su bienestar y salud.
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Para la formulación del PACCSA se planificaron cuatro encuentros en el Suroeste, el primero fue en el mes de julio, el segundo en el mes de agosto, el tercero será en el mes de septiembre y el último en el mes de octubre. En estos encuentros se invitan a diferentes actores de la región a dialogar y a entender las problemáticas, vulnerabilidades y las estrategias que se pueden implementar.
En los dos primeros encuentros los participantes concluyeron que hay un reconocimiento sobre la relación entre la crisis climática y la salud, no solamente en términos de los ejemplos directos e indirectos, sino también de las enfermedades vehiculizadas por el agua; como la enfermedad diarreica aguda, las enfermedades respiratorias asociadas a la calidad del aire y la preocupación que existe en la región por las afectaciones que puedan derivarse de la mega minería.
Así mismo, se relacionan otros aspectos como el manejo de agroquímicos y los modelos de producción que se utilizan en el Suroeste. Se sabe que, si no se hace un uso adecuado de estos agroquímicos, irán a dar a las fuentes de agua, además de las afectaciones directas que pueden causar en términos de intoxicaciones y demás.
Otro aspecto importante es el hecho de que los planes de ordenamiento territorial de muchos de los 23 municipios están desactualizados, esto se identifica como un aspecto ambiental clave frente a cómo nos organizamos en el territorio y cómo esa organización puede afectar la salud en relación con la crisis climática. Por ejemplo: si un plan de ordenamiento territorial permite realizar construcciones en zonas que no están adecuadas por asuntos de gestión del riesgo o manejo de recurso hídrico y demás, son presiones adicionales que junto con la crisis climática van a derivar en las afectaciones en la salud.
También en este diálogo constructivo, se destacó el suministro de agua potable (su calidad y cantidad), las prácticas agrícolas y la educación ambiental para el manejo de residuos arrojados a las fuentes hídricas y las quemas no controladas. De la misma manera, surgieron propuestas de los habitantes del Suroeste antioqueño en torno a sistemas alternativos de potabilización de agua de bajo costo para las zonas rurales o modelos de producción agrícola y ganadera que sean más sostenibles.
Sin duda, hay poblaciones más vulnerables frente a la crisis climática en Antioquia, sí, la afectación será total y no discriminará a nadie, pero no será de la misma manera. Desde un punto de vista de edad: niñas, niños y adultos mayores suelen ser más vulnerables ante olas de calor, la aparición de enfermedades transmitidas o cambios en la calidad del aire. También hay poblaciones que por sus características sociales económicas e incluso políticas pueden tener ya elementos que los estresan; que hacen que sus condiciones de salud sean más precarias sin crisis climática y ahora pueden verse agravadas.
Los efectos de la crisis climática ya se están percibiendo en cada uno de nuestros territorios, es necesario mitigarlos, pero también adaptarnos a las consecuencias que ya nos está trayendo.
Desde el PACCSA han dispuesto para comunicarse con la ciudadanía un correo electrónico y dos líneas de WhatsApp saludcambioclimatico@udea.edu.co 3052927072 y 3054817912, a través de estos medios te puedes comunicar para preguntas y aportes.
Ilustración: Jorge Ignacio Mesa