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Historia de la Señorita Martina Álvarez


Cortesía El Poncherazo

Martina Álvarez profesora de escuela rural de El Cedro (Amagá), en la década de los cuarenta, era de un porte muy elegante, utilizaba un sombrero en forma de campana con una pluma, velo, una chaqueta en cuyos puños sobresalían las franjas de la blusa, usaba perfumes finos y un pañuelito muy delicado con el que se limpiaba el sudor de su frente. Muchos años después vino a vivir al pueblo en la casa que está situada a la izquierda del templo parroquial en la que nació el escritor amagaseño Juan de Dios Restrepo, más conocido como Emiro kastos.

En el segundo piso de la heladería El Femenino, hoy Heladería La familiar; allí organizó un jardín de niños en el cual se enseñaba lo elemental de lectoescritura, matemáticas, educación religiosa y valores cívicos. Todos los días sagradamente, el canto de turpial amenizaba las mañanas y el sol irradiaba nuestro pueblo.

Cotidianamente, llegaba al templo en perfecta fila, para orar ante el señor y tenía signos convencionales para que los niños supieran cuando sentarse, pararse y volver a la fila, estas palmaditas las daba a su libro de oraciones y cuando pasaba el padre Carrasquilla decía un “Padre Nuestro” por las intenciones del cura. La acompañó muchos años, Helenita Taborda de la vereda El Cedro, donde la señorita Martina fue maestra, hermana de don Jesús Taborda y Sabino Taborda, tíos del maestro Antonio Taborda.

La señorita Martina y Helenita; las dos organizaban las lámparas, con aceite de higuerilla, esas lámparas, se colocaban al pie del Sagrario del Santísimo, además preparaba en las oraciones muy bien a los niños del pueblo, para recibir la Sagrada Comunión. Su labor dejo una honda huella en la historia de la educación de Amagá , porque era admirable, trabajaba por el bien de los niños, sin ningún pago, muchos niños sentaron las bases y fundamentos de su fe en las enseñanzas hermosas, de la señorita Martina, ella nos enseñó que lo fundamental en la educación del ser humano es formar su corazón, su dimensión espiritual, en la casa de la familia Correa Ángel,  reposa imagen de la Virgen de la Inmaculada Concepción, herencia de la señorita Martina, es una reliquia religiosa que quiere y aprecia mucho esta familia .

Fuentes:
Francisco Orozco Vanegas - Pacho
Daniel Granados Cano
Lucia Valencia Cano
Familia Correa Ángel

 

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