Jamás imaginé que el Bolívar de mi infancia (hoy Ciudad Bolívar) alguna vez hubiera poseído un órgano de tubos y solo hasta ahora vengo a enterarme sobre la noticia de que la parroquia de nuestro municipio ha tenido en su poder semejante joya. Supongo que en alguna de las ocasiones en las que, estando en allí y asistiera yo a un acto religioso en su iglesia, sonó en todo su esplendor ese instrumento musical, algo que me debió estremecer y llenar mi espíritu de ese misterioso placer que produce una pieza musical magistralmente ejecutada. Es de imaginar la gran importancia que, tanto desde el punto de vista espiritual como cultural, debió tener este órgano para el municipio.
Según la información suministrada por Carlos Vanegas, Nota un experto en el arte de la restauración de pinturas, cultor de objetos de valor artístico e histórico, conocedor autorizado de esta clase de instrumentos musicales e intérprete de obras musicales – actualmente radicado en el corregimiento de Alfonso López (San Gregorio) de C. Bolívar — y quien le ha hecho seguimiento a la historia de este instrumento, se trata de un órgano de estilo romántico construido por la Casa Balbiani (Milán, Italia), que fuera adquirido inicialmente para la iglesia de Jericó, en la que prestó sus servicios hasta el 1946, año en el que este templo debió de ser demolido debido a fallas estructurales, lo que obligó a que el órgano en cuestión tuviera que ser retirado. Luego de ser ofrecido a varias parroquias del Suroeste ese mismo año, este fue a parar finalmente a Bolívar en donde empezó a formar parte del inmobiliario musical de la parroquia hasta la década de los 80.
Órgano Cavaillé Coll Convers. Propiedad de la iglesia de Yolombó (Ant.)
Por esos años y por razones de trabajos de mantenimiento en la iglesia de Bolívar, el órgano terminó siendo desbaratado y sus venerables piezas pasaron a ocupar un lugar en un cuarto de san alejo, expuestas al deterioro y a la acción inclemente del olvido, con el agravante de que, al desmontarlo sin los cuidados técnicos requeridos para esta clase de tareas, se produjeron daños en el ventilador eléctrico, que es la pieza que suministra el aire que, al pasar por los tubos, produce las vibraciones sonoras características en esta clase de aparatos y que es, por obvias razones, una parte fundamental de su sistema de sonido. De igual forma, muchas otras partes debieron resultar dañadas en el proceso de desmonte o se han venido deteriorando o perdiendo con el paso del tiempo, según lo informa Carlos Vanegas.
El olvidado órgano de la iglesia de C.Bolívar
Pese a lo anterior, Carlos Vanegas está seguro de que el órgano puede ser totalmente restaurado si la parroquia de C. Bolívar toma la decisión de emprender ese proyecto, para lo cual él estaría dispuesto a prestar su colaboración, por ejemplo, llevando el liderazgo del mismo, ya que, de acuerdo con la revisión que él personalmente ha hecho de las piezas de este aparato, su sistema sonoro se encuentra en buen estado aproximadamente en un 70% y las piezas faltantes pueden ser fabricadas en Colombia, puesto que el país cuenta con organeros técnicamente capacitados para ello.
Rubén Darío González Z.
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NOTA:
Carlos Vanegas es oriundo del municipio del Carmen de Atrato, ha estudiado el oficio de restauración de obras de arte, profesa el arte de la música y actualmente colabora con la parroquia S. Pío X del corregimiento Alfonso López apoyando la labor de esta iglesia, entre otros, en el campo de la recopilación de documentos históricos y en el proyecto de construcción de un techo abovedado estilo colonial.
El olvidado órgano de la iglesia de C.Bolívar
