Comparta esta noticia
Por Fer Campillo
Comunicador Social - Locutor

En Urrao, la figura de Freddy Restrepo se ha convertido en un referente silencioso pero indispensable para la protección animal. Desde hace más de diez años, este reconocido animalista dedica su tiempo y su energía al rescate, rehabilitación y acompañamiento de animales víctimas del abandono y la indiferencia. Su labor, constante y profundamente humana, lo posiciona como un defensor incansable de quienes no tienen voz.

Freddy acude a cada llamado de auxilio. Día tras día, recibe mensajes y llamadas de personas que encuentran perritos y gatitos heridos, enfermos o en evidente estado de vulnerabilidad. Él no duda: se desplaza, recoge, protege y canaliza a estos seres hacia tratamientos veterinarios gracias al apoyo desinteresado de profesionales que se han unido a esta causa. Cada recuperación es una victoria y cada vida salvada, un mensaje de esperanza.

Este trabajo se vuelve aún más relevante en un momento crítico para el departamento. En los últimos días, Antioquia ha sido escenario de varios casos de maltrato animal que han despertado indignación y preocupación entre la comunidad. Se han presentado episodios dolorosos que evidencian, una vez más, la urgencia de educar, sensibilizar y actuar para proteger a aquellos seres que dependen por completo de la responsabilidad y la bondad humana.

Freddy insiste en algo que repite con convicción: la protección animal no es tarea de uno, sino responsabilidad de todos. El abandono, los golpes, la negligencia y la indiferencia no pueden seguir siendo parte de la realidad de nuestro territorio. Adoptar con responsabilidad, esterilizar, brindar alimento, denunciar el maltrato y apoyar a quienes trabajan por la causa son acciones que transforman vidas y evitan más sufrimiento.

Su ejemplo es un faro que ilumina el camino hacia una comunidad más consciente y respetuosa. Freddy Restrepo no solo rescata animales; él despierta corazones, inspira cambios y recuerda que la grandeza de un pueblo también se mide por la forma en que trata a sus seres más vulnerables.

Hoy, su labor continúa firme, imparable y profundamente necesaria. Porque en Urrao, y en todo Antioquia, Freddy es ese guardián silencioso que, con amor y compromiso, sigue defendiendo la vida y sembrando conciencia.

Lectura recomendada: 

 

Comentarios
Comparta esta noticia