En los últimos 40 años el municipio de Amagá ha sido testigo de tres tragedias mineras que han cobrado la vida de 159 seres humanos, sucesos que han marcado la historia de este territorio y de sus habitantes. David Ramírez Zapata, maestro en Artes Plásticas de la Universidad de Antioquia, ha vivido de cerca estas tragedias debido a la muerte de su abuelo minero, al que no conoció, y al trabajo en las minas de su padre quien sufrió un accidente en el desarrollo de la labor.
Las muertes a causa de los accidentes ocurridos en minas son recurrentes no solo en Amagá sino también en los territorios a lo largo de la Cuenca de La Sinifaná. Muertos que, a medida que pasan los años, pareciera que se olvidan, pues los accidentes a gran escala, y a pequeña también, se repiten una y otra vez.
David lo sabe y por eso se ha propuesto hacer un llamado a la memoria colectiva, a recordar a aquellos que ya se fueron y a que nos preguntemos cómo sacar del anonimato a las víctimas del carbón.
Este joven amagaseño ha recorrido diversas salas del país con sus exposiciones y nunca olvida que Amagá es su lugar de origen, él invita a los habitantes del municipio y de la región del Suroeste a contestar esta pregunta a través de la instalación ¿Muchas no son tantas?, una obra escultórica que busca hacer visible estas tragedias mineras, esta problemática social que históricamente ha afectado estos territorios.
Una pila de 7 toneladas de carbón de hulla, hará parte de la obra, sobre ella reposará una serie de 2.100 cadáveres de canarios mineros, hechos en el mismo carbón; canarios como los que son introducidos a las minas para detectar gases y que al dejar de trinar avisan que hay peligros inminentes y muerte.
Con su propuesta para construir memoria, David Ramírez ha sido ganador de la Convocatoria Pública en Cultura y Patrimonio 2017, Antioquia Piensa en Grande la Cultura y el Patrimonio, del Instituto de Cultura y Patrimonio de Antioquia.
Una obra que será exhibida del 1 al 9 de diciembre de este año en la sede primaria de la Institución Educativa Escuela Normal Superior Amagá, donde el artista creó y creció durante seis años de su vida, un espacio para que niños y niñas, jóvenes y adultos se acerquen y reflexionen en comunidad si ¿Muchas no son tantas?
