Aprendamos con la maestra
Por Lucila González de Chaves lugore55@gmail.com lucilagonzalezdechaves.blogspot.com
(Resumen de dos conferencias sobre la ansiedad, leídas en días de una insoportable incertidumbre, al repetirse y repetirse el rebrote de la COVID-19. Lucila González de Chaves, noviembre de 2020).
1.
Apagar la alerta, es decir, detener la primera sensación de ansiedad. Pararla con un pensamiento o una palabra o una imagen agradables.
2.
Detenerse largo rato en aclarar y entender esto: “¿qué estoy pensando?”, “¿cómo lo estoy pensando?”
3.
Modificar las creencias muy arraigadas desde hace mucho tiempo y las opiniones de diversa índole, y que se tienen como hábito.
4.
Liberar la tensión física y emocional mediante lecturas, escribir, pasatiempos, el ejercicio de la voluntad y los ejercicios físicos, estos deben aflojar los músculos, especialmente en el plexo solar y el chacra de la garganta.
5.
Contener las emociones y no darles salida, es el mayor factor de ansiedad. Si no hay con quien hablar de ello, hacerlo consigo mismo y de manera oral o escrita. La contención de las emociones es muy dañina.
6.
Hacerse cargo de sí mismo en todo: en el pensar, en el sentir, en el definir, en el hacer. Es necesario para recuperar la confianza personal y mantener la valentía.
7.
Perderle el miedo a la ansiedad. Al sentirla llegar, recibirla conscientemente y reflexionarle con lógica y valentía. Esto la diluye.
8.
Aprender a respirar: despacio, profundo, relajado, llevando el aire hasta el vientre y sentir que la buena respiración llega a cada punto de nuestro cuerpo.
9.
Reflexionar severamente y sin trucos sobre cuál es la raíz de ese ataque de ansiedad; no disimularlo, no enmascararlo y menos negar su presencia, no importa que los demás
se molesten.
10.
Aceptar que se tiene ansiedad, repasar lo que se está sintiendo en lugar de taparlo y aceptar los hechos que la produjeron.
11.
Realizar continuamente cambios cognitivos, es decir, repetirse como un mantra: tengo salud mental, emocional y física, soy fuerte, capaz y valiente.
12.
Disfrutar a plenitud los momentos de descanso: caminar, ver, oír, dormir, comer, conversar, acercarse a la naturaleza, hacer las cosas que nos guste sin pensar en los otros.
13.
Es muy necesario el sueño. Deben tenerse más de cuatro horas de sueño.
14.
Tomar aromáticas que relajen: manzanilla, valeriana, etc. Mantener la hidratación y tomar probióticos.
Por Lucila González de Chaves
lugore55@gmail.com
lucilagonzalezdechaves.blogspot.com