Con la Fundación Sueños por Colombia la tarea será más fácil: nueva aula virtual en Bolombolo, el sueño que trajo la pandemia.
Ayudar y atender las necesidades de las personas más vulnerables, propiciar espacios de conectividad para que los estudiantes realicen sus tareas y mantener sus proyectos de sostenibilidad económica son algunos retos de la Fundación Sueños por Colombia, que se han mantenido firme en su trabajo social durante la pandemia.
Y es que la generosidad de algunas personas, de empresas aliadas a los proyectos de la Fundación, de los líderes de los territorios, de mujeres cabeza de familia y el apoyo de la Administración Municipal de Venecia, ha hecho posible que durante la pandemia se mejore la calidad de vida y las condiciones socioeconómicas de la población de Bolombolo a través de paquetes alimentarios y kits de aseo.
La pandemia no solo llegó con la incertidumbre, también trajo sueños para que la Fundación los hiciera posible con sus niños, niñas y jóvenes.
Trasladar los programas a la virtualidad fue un gran reto cuando la pregunta constante era ¿Cómo lograr que los niños y niñas que no tienen conectividad en sus casas puedan realizar sus tareas? La mayoría hace las tareas desde el teléfono, algunos carecen de señal wifi y otros no tienen cómo hacerlas o no cuentan con los recursos tecnológicos y económicos.
La respuesta: instalar un aula virtual dotada de 10 computadores con acceso a internet para que los estudiantes del corregimiento de Bolombolo desarrollaran sus trabajos escolares.
“Esta aula virtual es una oportunidad no solo para brindar equipos sino también para cerrar brechas tecnológicas en el corregimiento. Tendremos un docente de la zona, nuestro enfoque será en valores y en este espacio los estudiantes podrán estudiar, aprender, jugar, capacitarse, cumpliendo las normas de bioseguridad, en un trabajo
articulado con la Alcaldía Municipal. Aquí seguimos firmes porque esta es una apuesta de desarrollo territorial en el Suroeste que tiene que seguir funcionando”, relata Gina Montes, directora general de la Fundación.
La apuesta por la sostenibilidad de la Fundación Sueños por Colombia es un reto esencial. A través del Centro de Servicios de Bolombolo para el Suroeste la Fundación proyecta su labor social en tres líneas de trabajo: catering empresarial, manufactura y turismo comunitario. “Estos proyectos de mujeres y jóvenes de Bolombolo son una oportunidad y apuesta de desarrollo económico. A pesar de estar angustiados por la pandemia, hay esperanza y esto sigue. Bolombolo aporta al desarrollo de la subregión a través del empoderamiento comunitario. Sumamos, damos valor, aportamos y ayudamos a mejorar la calidad de vida de los habitantes con nuestra presencia en diferentes municipios del Suroeste”, agregó Gina Montes.
A los semilleros de paz, al laboratorio lúdico, a los programas y la escuela de liderazgo, se le suma el aula virtual que se inaugurará el 3 de noviembre en su sede en Bolombolo, Venecia. Será un espacio para fomentar la creatividad e innovación de
los niños y niñas; para crear, pensar diferente y realizar sus talleres escolares. Con la Fundación Sueños por Colombia la tarea será más fácil.