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Emiliana es la primera mujer trans del Suroeste que ha participado en un torneo deportivo como integrante de un equipo femenino. Ella es una mujer del municipio de Amagá, fue personera de su colegio y le gusta ayudar a las personas.

“Ser mujer no es solamente serlo, es sentirlo, también creerlo, no es solo la apariencia física: verse como una mujer. En realidad, es ser como tú crees y sientes que estás siendo tú misma. Los comentarios van a segundo o tercer plano. Se es mujer en el interior, para reflejarlo”.

Emiliana vivió su transición en el municipio de Amagá al salir del grado once y cumplir sus 18 años; tras haber sido personera de su colegio. A sus 24 años, trabaja como auxiliar administrativa en salud hace dos años y cuatro meses, y también es auxiliar de odontología, graduada del 2015.

En Colombia, el acceso a empleos y educación para personas trans es difícil y lleno de obstáculos. Un estudio del Centro Nacional de Consultoría y la Cámara de Comerciantes LGBTIQ+ de Colombia, señaló que más del 50% del personal que trabaja en áreas de talento humano no tiene conocimiento sobre cómo abordar los temas de diversidad sexual en el entorno laboral.

“Lo que más me ayudó fue el apoyo de amigos, amigas y familia”.

Emiliana dice:

Conozco muchos y muchas trans que no tienen el apoyo de la familia, a esas personas les digo lo siguiente:

– Respetemos y amemos a los otros, las personas trans no le hacemos daño a nadie por el hecho de ser trans.

– Somos libres y no le tenemos que dar explicación a nadie. El mensaje que yo le dejo a todas las personas que tienen contacto con una persona trans, es que seamos comprensivos, tolerantes, respetuosos y no le hagamos a nadie lo que no nos gustaría que nos hicieran a nosotros.

– Estamos en un mundo donde la diversidad es un pilar común en nuestras comunidades, personas diversas son ejemplo de perseverancia, de fortaleza y una oportunidad para aprender y crecer.

– Nada más bonito que estar en paz, en tranquilidad y aprender a respetar las decisiones. Las personas trans amamos y queremos como cualquier otra persona.

En su familia la gran mayoría de integrantes son mujeres, creció en un contexto familiar con prevalencia de la figura materna: abuela, tías, primas; fueron un ejemplo a seguir y un apoyo.

A pesar de que en Colombia existe la Ley 1752 del 2015, que en su primer artículo destaca que “tiene por objeto sancionar penalmente actos de discriminación por razones de raza, etnia, religión, nacionalidad, ideología política o filosófica, sexo u orientación sexual (…)”; según el presidente de la Cámara de Comerciantes LGBTIQ+ de Colombia: “es en entidades del Estado en donde todavía estamos más atrasados en entender que deben existir espacios laborales sin discriminación, sobre todo a nivel regional donde falta un gran trabajo para que la función pública de empleo garantice estos ambientes”.

Mujer trans en el deporte regional

Emiliana juega voleibol desde el año 2015. “Para mí nada es más gratificante que me reconozcan por algo diferente, sobresalir no solo en espacios como el modelaje u otros en los que es más común ver mujeres trans”.

“Toda la vida he sido cercana al deporte, en la niñez practicaba natación y a medida que fui creciendo descubrí que me gusta demasiado el voleibol, le dedico demasiado tiempo a este deporte. Siempre ha habido un tipo de discriminación, pero siempre he tenido personas que me han apoyado”.

Emiliana siempre estaba con su grupo de amigas y trataba de estar rodeada de mujeres, “yo iba a entrenar con las niñas, en ese tiempo estaba en mi tránsito y era consciente de que no podía jugar con las niñas, así yo me sintiera una mujer”.

“En el 2015 hice mis trámites legales para cambiarme el nombre y el sexo y lo hice a nivel legal y ya podía entrenar con ellas. Al principio fue algo difícil, mucha gente trató de atacarme por la parte legal, pero yo ya había hecho los trámites y ya podía hacerlo, no me podían negar el derecho a participar en el equipo y así voy todavía en la lucha, las personas me han hecho sentir súper bien”.

“Se puede apoyar a las personas trans, desde la formación, apoyar el respeto por las diferencias”. 

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