“Sí, sabes que ya llevo un rato esperándote,
debe el retroactivo que aumentó.
Sí, a los docentes que están engañándoles,
con el pago de las primas hoy (…)
Trato digno, los docentes merecemos trato digno,
que no vengan con los mismos cuentos chinos,
como esa salud que nos tiene jodidos”…
Algunos docentes del Suroeste reunidos en Bolombolo cantan al ritmo de la pegajosa canción “Despacito”. No están en paro para que los padres de familia se vean “encartados” con sus hijos en la casa, y no están en paro solo para que les suban el sueldo a los docentes, no es tampoco la primera vez que lo hacemos, dice Miguel Araque Cuervo, docente de Salgar y delegado de ADIDA, que asegura que en los 23 municipios del Suroeste hay un porcentaje cercano al 90% de los docentes en paro.
Las movilizaciones en el Suroeste han sido masivas. “Se han desarrollado actividades como: comunas informativas, elaboración de afiches y carteleras, perifoneo, reuniones con padres de familia y estudiantes, marchas de las antorchas y de las luces, jornadas deportivas, chocolatada nocturna, sancochada, caravanas en chiva y motos por las zonas urbanas y rurales”, cuenta Miguel Araque y agrega que en esta región hay colegios sin celadores, secretarias, personal de aseo, internet e infraestructura para desarrollar una jornada única, pues en municipios una sola institución, por ejemplo, cumple en la mañana una jornada académica y en la tarde otra. Para una educación con calidad, Araque enfatiza que lo que se necesita en la región es que el Estado asigne las partidas presupuestales que cubra las necesidades de la comunidad educativa en general.
¿Por qué están en paro?
Al menos siete puntos forman parte del Pliego Nacional de Peticiones que se busca negociar con el Gobierno Nacional a través del Ministerio de Educación.
Al preguntarle a Miguel Araque por las razones que los docentes en el Suroeste marchan, protestan, cantan y están en paro, parece tener una lista extensa. “Por los mismos objetivos que estamos en paro los docentes del país: por la financiación de la educación pública, para que el gobierno destine los dineros para: restaurante escolar, transporte escolar y mejoramiento de la infraestructura física de las instituciones educativas; exigimos el cumplimiento de los acuerdos firmados con los maestros en mayo del 2015, por la contratación de un sistema de salud digno para los docentes y su grupo familiar, por un incremento salarial justo y legal, entre otros”.
Los docentes son claros al manifestar que es una necesidad de todos; no solo de ellos. “Quienes aún no nos han apoyado que se solidaricen con nuestra causa, ya que estamos luchando por una educación digna, con calidad, con plantas físicas óptimas, con restaurante y transporte escolar para los niños y jóvenes”.
En la región, a través de las redes sociales de los sindicatos y la información en medios, los docentes hacen continuo seguimiento a las conversaciones con el Gobierno. Para Araque se han presentado algunos inconvenientes, porque el Gobierno dice que no hay presupuesto, “lo cual ocasiona una serie de dudas, como: ¿dónde está la partida presupuestal para educación contemplada en el presupuesto de la nación para 2017?; ¿qué destinación le da el Gobierno al 19% del IVA?; el presupuesto que destinaba para la guerra, ¿qué destinación tiene?; ¿por qué el Gobierno no paga lo que debe al Fondo de prestaciones sociales del magisterio?
Los docentes siguen en pie de lucha. Con carteles en los parques, en los salones de clase y esperando ser escuchados. En la jornada nacional del 30 de mayo los docentes del Suroeste también salieron a las calles.
“Marchando, marchando, el maestro también está enseñando”, “mientras existan docentes de pie, no habrá pueblos de rodillas”, “los corruptos disfrutan y los pobres tributan”.
*Redacción El Suroeste