Nunca nos acostumbraremos a contemplar la tristeza de despedir a nuestros amigos o familiares. Nos invaden temores y queremos siempre estar ahí, aferrados a esta tierra morena, la que nos dejaron nuestros padres y abuelos como herencia para que la disfrutáramos.
Somos testigos de un lamentable acontecimiento nunca antes registrado en la historia de nuestra provincia fredonita: la muerte de su líder, de su conductor, de su amigo y protector Gabriel Ignacio Muñoz Gómez. ¡Qué rápido partiste hacia el Arcano! Dejaste iniciada una gran tarea, solo siete meses estuviste rigiendo los destinos de tus coterráneos.
Muchísimo tiempo te recordaremos, por tu euforia y capacidad al expresarte, tu elegancia no solo en el vestir, también en tus modales. Fuiste un hombre capacitado y sapiente. Tu trayectoria como empleado, como hombre público te llevó a sus situaciones de honor que compartiste con tu familia y con tus paisanos. Se inicia para ti la vida celestial.
Acá quedamos aún ansiosos del cambio que tú pregonaste en tus interesantes alocuciones. Será muy triste contemplar sin ti el ritmo proceloso que deberán seguir quienes deseen continuar y trasegar en las actividades que a todos nos benefician.