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Los Tribunales de Amagá son patrimonio cultural por acuerdo del Concejo Municipal. Se realizan hace 103 años, por el COVID-19 en el año 2020 no se llevaron a cabo y este 2021 es la primera vez que se hacen a puerta cerrada, transmitidos en vivo desde el Palacio Municipal a través del canal comunitario y Facebook.

Toda la comunidad se vincula de alguna forma a estos Tribunales: los actores son de todas las edades; campesinos, mineros, comerciantes y profesionales. El presentador, los músicos y los artistas del pueblo, el canal comunitario Amagá TV y la Administración Municipal también se unen para mantener viva esta tradición.

Eduardo Betancur lleva 41 años participando de los Tribunales, 8 como actor y 33 como director. Eduardo nos contó que año tras año mantiene vivo su sentido de pertenencia por las tradiciones.

Eduardo Betancur se siente satisfecho después de la presentación de este año: “tener acá una cantidad de personas, casi 100, desde los niños hasta los más adultos, entregados con esa dedicación para hacer que esto saliera, es lo mejor”.

El libreto está basado en la Pasión de Cristo y tiene adaptaciones: especialmente una de Francisco Orozco, con una poesía dedicada a María, madre de Jesús, es una escena en la que participan los personajes de María, Simeón, José, los ángeles y el niño Jesús.

De generación en generación y con ascensos

El que hizo este año el papel de Anás, comenzó en su momento como soldado, el que hizo el papel de Caifás hoy, Nino, empezó como emisario. Hay niñas que han empezado como ángeles y pasaron a criada, de criada a una María, de un personaje a otro, por años, y todos, se saben los papeles de todos.

“Entre ellos mismos se van rotando el papel, dicen: yo soy capaz, venga que yo lo actúo y uno les ve la capacidad. Hay un material y un talento humano muy verraco de bueno, no somos profesionales ninguno, pero con mucha dedicación sacamos esto adelante cada año”, agrega Eduardo Betancur.

La hija y la sobrina de Eliana Andrea Ramírez participan en Los Tribunales por herencia, “todos en la familia hemos participado en la Semana Santa, yo fui también muchos años ángel, luego fui criada, luego fui Claudia, la esposa de Poncio y eso se hereda, va en la sangre, yo fui de la Banda Sinfónica muchos años, entonces estaba en la banda, Los Tribunales y lo mismo hace mi hija, ella es clarinetista en la banda y ahora ya está en los tribunales.

Era emocionante ver que el parque se llenaba que no cabía un alma y saber que estaban centrando la mirada en uno como actor”, cuenta Eliana Ramírez.

“Me gusta hacer parte de Los Tribunales porque me gusta destacar, antes era el ángel del Jueves Santo, Don Eduardo me ascendió y ya soy, también, el ángel del Huerto de los Olivos”, cuenta la hija Eliana.

Comunidad en escena

“Acá hay muchachos de la UAI (Unidad de Atención Integral) que hacen de soldados, tenemos personas discapacitadas como Elmer Salazar, como Palomo, el popular Palomo, que era soldado y ya es acusador. Ramón Parra, ha sido soldado y ha hecho el papel también de Barrabás, y son personas con esa discapacidad y uno no los trae aquí para que se los gocen, esto es de respeto, y si miramos la esencia, la trayectoria, cuando uno ve estas 95 personas vestidas, ya esto es otra cosa, y Fabián Muriel que nos hace la narración, espectacular”, cuenta Eduardo Betancur.

Luis Alberto Molina, administra una finca productora de flores de exportación en Altos de la Bonita y lleva 22 años participando de Los Tribunales.

“A mí siempre me ha gustado el teatro. Cuando yo estuve en el colegio monté un grupo de teatro que se llamaba Estrellas Nacientes de Camilo C, pero por las obligaciones y el trabajo ya uno se alejó de eso, terminamos el colegio y cada uno fue cogiendo por su lado”. Antes hacía el papel de Anás, este año hizo un papel diferente, pero dice que cualquiera le gusta, “Como a uno le gusta la actuación, está dispuesto a revivir cualquier papel, para mí estar actuando es como estar conversando”, agrega Luis Alberto Molina.

Omar Mauricio Posada es un comerciante del pueblo apasionado por el cine clásico, hace parte de Los Tribunales desde 1993, empezó como actor, era el apóstol Lucas. Se le fue prendiendo el bombillito y propuso nuevas escenas de la vida de Jesús que se incorporaron al libreto, así como sonidos y efectos especiales, para que Los Tribunales parezcan una película.

Películas como Flores en el ático, Diario de una pasión y La Pasión de Cristo, hacen parte de la colección de películas y música clásica que Mauricio Posada incluyó en Los Tribunales.

“Cuando yo llegué a este grupo había 37 personas, considero que, en la vida de Jesucristo, pasaron muchas cosas y nos limitamos a unas”. Hechos como la resurrección de Lázaro, el encuentro de Jesús con las Marías en el recorrido del Viacrucis, el desespero de María cuando escucha que Caifás ordena poner preso a Jesús para que vayan y lo ejecuten al otro día y la impotencia de ella como madre no poder hacer absolutamente nada.

Hay momentos de mucha emoción, en los que se nota el sufrimiento de los personajes. Los sonidos y efectos especiales buscan acompañar estas sensaciones y que el público sienta frustración, tristeza, emoción o lo que corresponda a cada escena.

“Yo hice una vez el papel de Belibeth, un sirviente de Caifás muy arraigado a sus doctrinas y muy fiel a él. Caifás necesitaba una persona que fuera a hablar ante Pilatos para acusar a Cristo, que lo hiciera con tesón, con verraquera y decisión, y cuando yo hice eso, mi mamá se impresionó y cuando yo llegué a la casa a comerme la torta de pescado, me va diciendo: retírese de eso, usted le tira muy duro al Señor”, cuenta Mauricio Posada.


En algunas escenas las personas en el recinto demostraban la emoción que sentían, algunas personas expresaban sentir ‘la piel de gallina’.

Emanuel, el hermano de Pablo José, que hizo el papel de Judas, tuvo que ir a verificar que seguía vivo, después de ver la escena en la que él se suicida con una soga. Pablo José Muriel empezó en Los Tribunales como soldado, luego como acusador, después estuvo cinco años por fuera porque estuvo en la Banda Sinfónica.

“El año pasado volví a hacer el papel de Judas, sino que no lo pude a hacer por la Pandemia, pero ya este año pude hacerlo. Desde muy pequeño yo veía los tribunales en el parque y don Eduardo le decía a mi mamá: métalo, métalo, para que empiece ese camino en Los Tribunales; eso me motivó. Esto es para todo el mundo, los que vivimos en Amagá en algún momento deberíamos hacer parte de esta tradición”, dice Pablo José Muriel.

Alba Cecilia Posada es la mamá de “Checho Granados” quien hace el personaje de Jesús.

“Cuando él llegó a la casa que lo habían llamado para participar, todos nos sentimos felices, porque es una parte de la historia, siempre venimos a verlo, con el tiempo ha mejorado su papel ensayando año tras año, lo hemos acompañado en los ensayos, me siento feliz, satisfecha porque es un papel muy importante y me siento orgullosa”, cuenta Alba Cecilia Posada.

En la obra hay un esfuerzo adicional por los efectos especiales: sangre, sudor… se elaboran a mano todos los elementos de indumentaria para hacer que sea una puesta en escena más realista.

Una juntanza de esfuerzos

A través del Facebook de Amagá Televisión se reportan personas de todo el mundo viendo Los Tribunales. Aproximadamente 300 usuarios disfrutaron de una transmisión hecha a 5 cámaras con una presentación simultánea en la que se hacen comentarios y entrevistas sobre Los Tribunales.

Adriana Ángel, coordinadora de la Defensa Civil, participa con su grupo de Los Tribunales con satisfacción, porque les gusta que estos eventos se den, siempre están prestos para ayudar en lo que se necesite y hacen las cosas de corazón.

La Defensa Civil y los Bomberos del municipio tuvieron la labor de mantener los protocolos de seguridad y estar pendientes de que ninguno de los participantes tuviera una calamidad. Hubo líderes que, además, ayudaron en las escenas, a sostener desde atrás la cruz de Jesús con una cuerda o a amarrar a los ladrones.

Fabián Muriel, hace parte de la Defensa Civil hace 5 años, vive en El Cedro y trabaja en agricultura, a veces también manejando moto taxi. Adriana lo describe como colaborador “en lo que yo lo necesite llega”, cuando Adriana lo llama, Fabián le pide permiso a su patrón, “voy a ir allí a hacer un trabajo de la Defensa Civil”. Fabián siembra caña, café y maneja máquinas para sacar la panela. Él, de traje naranja, junto a un miembro de los bomberos, sostuvieron tras bambalinas a Jesús crucificado.

Mientras los integrantes de la Banda Sinfónica José Antonio Espinoza, esperan para tocar, disfrutan de la puesta en escena.

José Antonio Espinoza compuso algunas obras que se interpretan en la Semana Santa de Amagá, los pregones se fueron incorporando con los cambios del libreto, cuando se fue volviendo más grande.

“Los músicos en ese tiempo eran muy tradicionales y devotos a la religión, ahí estaba mi abuelo y los hermanos de mi abuelo, Rubén, Vicente, Pacho, y montaban obras para la salida de las misas en pleno atrio: pasillos, bambucos y música parroquial y en general en eventos religiosos, como la Semana Santa”, cuenta Duván Montoya, trompetista de la Banda.

Román Montaño, ingeniero de sonido y productor, tiene una empresa de eventos y logística, es ingeniero de sonido hace 22 años, antes trabajaba para grandes empresas del país pero decidió montar su propia marca, “es mi primera vez haciendo parte de este montaje, es una obra muy bonita, un gran elenco, muchos talentos juntos”.

Román cuenta que hizo una semana de preproducción, organizando escenario, decidiendo cómo lo iban a montar, pensando en que todo tuviera la mejor acústica, preparando todo para que fuera perfecto. “Esto es una gran responsabilidad porque la mezcla que hacemos no solo es para los actores sino también para televisión, llegamos aproximadamente a 5.000 hogares del municipio”.

Un colectivo audiovisual del municipio, llamado La Cumba, realizó un documental llamado ‘Pasión y Orgullo: Tribunales de Semana Santa en Vivo’ en donde indagan en las historias y motivaciones de las personas involucradas, demostrando que, en Semana Santa, Amagá es una comunidad en escena. Mira el documental dando click aquí.

En Amagá, la Semana Santa se ha convertido en una oportunidad de encuentro cultural, participación de la gente y visibilibilización de grupos organizados y actores sociales del municipio ¿Te animarías a hacer parte de un trabajo como este? ¿Qué rol crees que ocuparías? 

 

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