Abrazar para sanar: la ciencia y la importancia detrás de los abrazos
Los abrazos además de ser una demostración física de afecto, pueden llegar a mejorar malestares físicos, problemas emocionales e incluso desacelerar el envejecimiento.
La investigación que ha sido adelantada por expertos de la Facultad de Psicología de la Universidad CES, ha estudiado un fenómeno denominado “hambre de piel”; de acuerdo con los investigadores este fenómeno se presenta a nivel neurofisiológico debido a la falta de contacto físico por el aislamiento social que ha traído la pandemia de COVID-19.
“Cuando nos abrazamos, la hipófisis posterior en nuestro cerebro libera oxitocina, que a su vez disminuye el cortisol y la adrenalina, que son las hormonas del estrés. Adicionalmente se libera serotonina, la hormona relacionada con el estado de ánimo, y otras que se vinculan al placer, como la dopamina, encefalinas y endorfinas”: Marta Isabel Martínez Zamora, doctora y coordinadora de la Especialización y Maestría de Neurodesarrollo y Aprendizaje de la Universidad CES.
Estre los diversos beneficios que la investiagación destaca acerca del abrazo como ejercicio afectivo, está la disminución en los dolores de cabeza, la disminución del insomnio, la regulación del apetito, menor envejecimiento y el fortalecimiento del sistema inmune, además de diversos síntomas de carácter psicológico, como la tranquilidad y disminución del estrés.
Es necesario tener en cuenta para hacer frente al fenómeno de “hambre de piel”, aumentar el contacto físico, explorando diversas opciones que no pongan en riesgo la salud, al estar viviendo la pandemia del coronavirus; una de las opciones puede ser aumentar el contacto físico y juego con las mascotas y aumentar el contacto con otras personas, teniendo en cuenta los protocolos de bioseguridad.
“Debemos aprender a abrazar con tapabocas, en espacios ventilados, hacer reuniones abriendo las ventanas. Es fundamental no olvidar el lavado de manos. Es emocionante volver a estar juntos y abrazarnos, pero siempre debemos recordar todas estas medidas en esta fase que atravesamos con la pandemia”, aseguró Martínez Zamora.
Existen diversos tipos de abrazos: de saludo, de felicitación, condolencia, amistosos, románticos, y son esenciales en las distintas etapas de la vida. Los expertos han demostrado que para los bebés es esencial el contacto físico, igual de necesario como la comida. A lo largo de la vida estamos diseñados para el contacto físico, tenemos vías cerebrales específicas para detectarlo y disfrutarlo. ¡Hoy regala un abrazo!