Comparta esta noticia

La Contraloría General de la República publicó a finales del mes de diciembre de 2017 que existen más de cuatro billones de pesos sin ejecutar del Sistema General de Regalías (SGR), con lo cual se encuentran en cuentas de ahorro y corrientes, en diferentes establecimientos bancarios.

Sin embargo, la promesa de la reforma a las regalías de 2011 fue la lucha contra la inequidad en la distribución de recursos para lograr el desarrollo regional y local a través de proyectos impacto en la población; con lo cual no es entendible cuando existen necesidades en educación, hospitales públicos en déficit, falta de cobertura de agua potable en zonas rurales y vías terciarias en mal estado.

En este sentido, se requiere una reforma al diseño del SGR para que obligue a los alcaldes y gobernadores con presencia en los Órganos Colegiados de Administración y Decisión (OCAD) a reunirse mínimo cada dos meses para aprobar, viabilizar o hacerle seguimiento a los proyectos que sean presentados por las alcaldías y gobernaciones, con un calendario o cronograma publicado anualmente para que las alcaldías y la ciudadanía conozca toda la información.

A su vez, se debe incluir que el Departamento Nacional de Planeación -DNP y los Departamentos Administrativos de Planeación Departamental brinden mayor asistencia técnica y profesional a las secretarías de planeación de los municipios sobre el proceso de presentación, aprobación, ejecución y evaluación de proyectos financiados con recursos del SGR.

De este modo, los alcaldes y gobernadores deberían presentar anualmente un informe de gestión sobre los proyectos presentados, rechazados y aprobados por parte de los OCAD para que la ciudadanía y líderes locales conozcan las fortalezas o debilidades administrativas, y se puedan ejecutar acciones de control social y político, que incentive a las administraciones municipales y departamentales a establecer procesos de mejoramiento.

Además, se debe dar participación a las provincias, regiones y áreas metropolitanas a tener voz y voto en los OCAD, dado que son las entidades administrativas llamadas a presentar proyectos de desarrollo con impacto social y económico en los municipios que agrupan.

Con lo cual, es darle importancia a la Ley de Ordenamiento Territorial para que estas puedan tener mayor autonomía e injerencia en la planificación y ejecución de proyectos de desarrollo regional en convergencia con los OCAD.

En otras palabras, necesitamos un Sistema General de Regalías con eficiencia, donde se privilegie el desarrollo local y regional, y atienda de manera oportuna las necesidades sociales y ciudadanas, y no estén los recursos en bancos cuando el desempleo y la pobreza ronda el campo y las zonas urbanas de los municipios.

Comentarios
Comparta esta noticia