Por: Leidy Cardona Vargas
Comunicaciones Alcaldía de Jardín
El suroeste antioqueño es una de las regiones más importantes para la historia de Antioquia, ya que fue la cuna de pobladores que abrieron camino a la economía, desde lo agrícola y la mano de obra especializada con sus construcciones de arquitectura colonial.
Son ya cien años desde que se inició a la construcción de la Basílica Menor La Inmaculada Concepción del municipio de Jardín, Antioquia, la cual se considera el más importante referente religioso y turístico del municipio conocido a nivel nacional e internacional. Por ello, el párroco Nolberto Gallego y su junta organizadora trabajaron arduamente para realizar un homenaje a dos grandes Presbíteros que fueron el pilar para el desarrollo religioso, educacional, cultural y urbanístico de Jardín.
Juan N. Barrera y Ezequiel de J. Pérez son los sacerdotes a los que esta comunidad rinde homenaje por su pujanza y compromiso con el pueblo jardineño.
Fue el presbítero Juan N. Barrera quién en 1918 se dio a la tarea de construir un templo con penitencias de la comunidad y con la devoción permanente en el corazón de Jesús, asimismo,
se brindó homenaje al presbítero Ezequiel de J. Pérez quien fue el propulsor de la educación en estas tierras jardineñas, fundando más de 10 escuelas rurales, el Liceo San Antonio y el convento de Las Hermanas Concepcionistas, además, evangelizó a la comunidad indígena de Karmata Rúa y compró los primeros terrenos para la iglesia, empezando por la casa cural.
De esta manera, el 1 y 2 de febrero Jardín estuvo de celebración, haciendo del primer día un homenaje póstumo mediante un desfile solemne en el que llevaban los despojos mortales estos dos grandes sacerdotes y un acto protocolario contando con la participación de todas las instituciones civiles, militares y eclesiásticas del municipio.
Igualmente, el segundo día se realizó una misa presidida por el señor obispo de la diócesis de Jericó y un cierre con entrega floral al busto de Juan N. Barrera, acto en el cual la comunidad muestra la eterna gratitud que se les tiene a estos dos hijos ilustres de Jardín.