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Por Eliana Hernández Pérez
elianahernandez.culturarte@gmail.com
@elianarte_

Andrés de Santa María Hurtado nació en Colombia el 16 de diciembre de 1860 en la ciudad de Bogotá y murió en Bruselas el 29 de abril de 1945 en Bélgica. Observando la cronología de su nacimiento y muerte, vemos que la mayor parte de su vida transcurrió en Europa. En el mundo del arte se menciona que es un artista inclasificable por la diversidad de movimientos artísticos con tintes impresionistas, postimpresionistas, expresionistas, fauvistas y simbolistas.

Andrés de Santa María siempre perteneció a la alta sociedad, y por eso muchos lo han descalificado, argumentando que no pintaba por vocación profesional, sino como un pasatiempo. Aun sabiendo que su padre no estaría de acuerdo —pues en aquella época ser artista no se consideraba una profesión digna para alguien de su clase—, decidió ingresar a la Escuela de Bellas Artes de París. La muerte de su padre fue el punto de quiebre que lo llevó a dedicarse por completo al arte. En 1904 asumió la dirección de la Escuela de Bellas Artes de Bogotá, cargo que ocupó hasta 1911, cuando decidió regresar a Europa. Es importante resaltar que durante este periodo realizó la primera exposición de sus obras en Colombia.

Andrés de Santa María ha recibido, a lo largo del tiempo, más críticas negativas que elogios por su obra. No solo fue cuestionado por dedicarse a la pintura siendo parte de la alta sociedad, sino también porque muchas de sus obras son retratos de familiares y amigos. Un ejemplo de ello es la frecuente aparición de Louise-Antoinette Feuardent, esposa de su amigo de toda la vida, Félix Bienaimé Feuardent. Esta recurrencia se debe a que, en los inicios de su carrera, se dedicó principalmente al retrato, una actividad que le generaba ingresos y le permitía sostener su práctica artística.

Es importante resaltar que, al evaluar juiciosamente su obra, se puede ver que Andrés de Santa María hizo mucho más que retratos. Le interesaban especialmente los paisajes y las escenas de la vida cotidiana en Europa, tal como se vivía en su época.

El sobrero negro

Si observamos la evolución de su estilo, podríamos ubicarlo más cerca del posimpresionismo. Esta conclusión se basa en que, a partir de 1894, su pintura comienza a caracterizarse por una pincelada rápida y corta, aunque sin el tratamiento de la luz artificial propia del impresionismo, relacionada con los avances tecnológicos del momento. Por eso, su obra no se enmarca del todo dentro de esta corriente.

Observar la obra de Andrés de Santa María es emprender un viaje fascinante por el mundo del color. En sus pinturas se percibe la experimentación con distintas vanguardias europeas de la época; sin embargo, no las adoptaba por completo. Lo que buscaba, más bien, era apoyarse en ellas para construir un estilo propio y crear algo distinto. Uno de sus grandes referentes fue Jean-François Millet. Un claro ejemplo de esta influencia es su obra Las segadoras(1895), que guarda similitudes con Las espigadoras (1857), de Millet. No obstante, una diferencia notable entre Santa María y los artistas de quienes tomaba inspiración es que su estilo se fue tornando cada vez más abstracto.

Cuando comienza a pintar naturalezas muertas, algunas de sus obras pueden asociarse con las de Vincent van Gogh, especialmente por la forma en que ambos exploran la luz. No buscan representar la imagen fielmente, sino que se trata de una búsqueda expresiva a través del color. En el caso de Andrés de Santa María, es importante resaltar que creaba sus propios colores, pues para él el color era simbólico: su obra tenía un carácter espiritual y en ella se reflejaba su mundo más íntimo.
En mis lecturas sobre este fascinante pintor encontré que, según algunos autores, realizó investigaciones sobre la óptica y la química de los materiales pictóricos. Creo que esto lo fue llevando, poco a poco, hacia la abstracción, porque lo que realmente le interesaba era descubrir todo lo que podía lograr con los colores.

El arreglo del bebé

Me parece importante contrastar lo anterior con un punto de vista diferente al mío, pero que complementa de manera valiosa lo ya expuesto. La historiadora del arte Luz Analida Aguirre Restrepo, magíster en Historia del Arte, aporta una lectura que enriquece la comprensión de la obra de Andrés de Santa María:

 “Lo encuentro más bien fuertemente vinculado con el impresionismo y el expresionismo. Es lo que a él le tocó ver en su época de juventud y en lo que exploró y experimentó. Entonces el cuestionamiento que lo motivaba era el factor físico de la luz en los objetos, por un lado y por el otro, cómo manifestar el inconformismo emocional y espiritual a través de la pintura”.

Por último, considero importante destacar que, aunque Andrés de Santa María nació en Colombia, vivió toda su vida en Europa. La técnica que emplea y los temas que aborda en su obra están profundamente enraizados en el contexto europeo.
Por esta razón, sostengo que no puede ser clasificado plenamente como un artista colombiano. Andrés de Santa María fue un artista europeo con nacionalidad colombiana.

Si deseas conocer más sobre su trayectoria y evolución, te invito a ver esta serie de videos donde presento un análisis detallado de su obra, estructurado en ocho períodos que abarcan cerca de 150 trabajos realizados a lo largo de su vida.

Mujer con canasto.

Hola soy Eliana y esto es ¡Grandes Artistas!

Capítulo 1

 https://www.youtube.com/watch?v=4we-2aHjJ4k&list=PLJjh6rgcgiTjTpYNCF0D9WqIFRD6_ftX6&index=3

Capítulo 2

https://www.youtube.com/watch?v=pMktZRFNZrg&list=PLJjh6rgcgiTjTpYNCF0D9WqIFRD6_ftX6&index=2

Capítulo 3

https://www.youtube.com/watch?v=tIa6IK5YceE&list=PLJjh6rgcgiTjTpYNCF0D9WqIFRD6_ftX6&index=1

 

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