Por: Roberto Antonio Caro Serna
Corresponsal Ciudad Bolívar
Ciclismo es una palabra mágica, sinónimo de compartir y de grupeta en vías de nuestro país. Pero no todo es color rosa. ¿Faltará más apoyo gubernamental a este deporte? En varios años ha mejorado la imagen internacional del país, ha permitido el desarrollo integral en la niñez y juventud y generado progreso familiar.
¿Quién no vibra al ver los escarabajos en las transmisiones internacionales? Con Bicigoga, la mejor del ciclismo animando a los ciclistas de Colombia y mejor dicho del Suroeste como Carlos Betancur, Julián Arredondo, Rigoberto Urán, Daniel Jaramillo, Jaime Restrepo y Mao Orozco, entre otra gran cantidad de hijos de estas tierras.
¿Cómo lograron llegar ahí estos representantes de nuestra región? Con sacrificio personal, familiar y de los diferentes municipios que han hecho algo a la medida de sus recursos que a la hora de la verdad son irrisorios, pero que con el trabajo de los clubes municipales y familiares, con rifas y donaciones voluntarias de algunos actores sociales y amantes a este gran deporte salen adelante.
En la actualidad vivimos una buena imagen deportiva y se han cosechado buenos triunfos en las competencia UCI, pero el contraste es que aún no inicia el proceso del Orgullo Antioqueño, una gran plataforma para lanzar a los deportistas a los grandes equipos Word Tour. Sería bueno tener en cuenta a jóvenes de las diferentes regiones de Antioquia, como potencial para un proceso de promoción deportiva.
El ciclismo es un deporte grato y agradecido. Mostrar nuestro Orgullo Antioqueño en cada competencia que se acuda es pujanza y como dice el dicho, por donde pasa un ciclista es Antioquia la que brilla. Si estamos “Pensando en Grande” debemos apoyar a nuestros jóvenes, que el deportista sienta ese orgullo de representar su bandera, pero con implementación deportiva, alimentación, seguridad social y un buen equipo de transporte. En fin, animar a que no muera el ciclismo como representante en el mundo de nuestra región.
Resaltar la labor que los deportistas profesionales vienen realizando en cada municipio es también alentar las nuevas generaciones; Urán con su entrega al club; Arredondo y Betancur en Ciudad Bolívar apoyando a los talentos para que lleguen a diferentes clubes nacionales e internacionales; Jairo Salas en Amagá, con su vocación y entrega para sacar adelante una comunidad, y así muchos ciclistas dan su granito de arena a la paz que inicia en el deporte de multitudes.