Por Rubén Darío González Zapata Nacido en la vereda La Lindaja Corregimiento Alfonso López (San Gregorio) Ciudad Bolívar
Comentario
Ficha técnica:
Título: Calderón, el reportero invisible
Autor: Diego Garzón Carrillo
Género: Biografía
Editorial: Planeta
Edición: Primera, abril 2022
Este libro es el relato del trabajo de investigación periodística llevado a cabo durante las primeras dos décadas de los años 2000 en Colombia por un periodista con características poco convencionales: bajo perfil, persistencia, habilidad extraordinaria para atar cabos sueltos e identificar conexiones a veces inimaginables, una valentía fuera de lo común y un desprecio absoluto por su propia seguridad e, incluso, la vida misma, rayana casi que en la locura. En una palabra, un periodista “nato”, que ha sacrificado incluso el bienestar de su vida familiar por amor a este oficio: Ricardo Calderón.
Detrás del escenario hipócrita de una institucionalidad aparente, se mueve con frecuencia un mundo de corrupción del que la inmensa mayoría de colombianos tal vez no tengamos la suficiente conciencia.
Por el libro y de la mano de la narración del también periodista y amigo suyo, Diego Garzón Carrillo, desfilan cerca de entre 15 y 18 años en los que quedan expuestas las publicaciones de la revista SEMANA hechas por Calderón, así como la manera como éste fue logrando hacer el trabajo de investigación para llevar a los atónitos lectores a conocer el bajo mundo de corrupción, espionaje ilegal, asesinatos, impunidad y privilegios inaceptables, que subyacen en las instituciones como el DAS, el Ejército y la Policía. Es la revelación de un universo oscuro que opera dentro de esas entidades en connivencia con el paramilitarismo y hasta con la delincuencia común. Un trabajo demoledor que, inexplicablemente, ha tenido apenas unas consecuencias leves en la opinión pública que se concretaron en la justicia o el gobierno con algunas destituciones de funcionarios de segundo nivel, con excepción del caso del DAS, institución a la que hubo de dársele entierro de quinta, ante la irrefutable cantidad de actos delictuosos y corruptos denunciados por Calderón y que hacían insostenible su subsistencia.
Desde la primera vez que escuché en Los Danieles hablar sobre la existencia de este libro, sentí una gran curiosidad por leerlo y, efectivamente, no estaba equivocado. La inmensa mayoría de nosotros, los colombianos del montón, los del promedio, los que vamos por la vida con el tiempo escasamente suficiente para pensar en las cosas de la casa, en cómo obtener los ingresos para sacar adelante los hijos o en cómo mantener a flote un pequeño negocio que a duras penas da para vivir; los que escasamente estamos informados acerca de lo que pasa en el mundo a través de los medios convencionales de comunicación y, ahora, a través de unas redes sociales que en gran medida solo desinforman y siembran confusión, no somos conscientes de que detrás de las bambalinas del escenario de un Estado que creemos conocer, se mueve un extraño y desconocido universo del delito o de actividades que rayan en lo delictuoso; una especie de sub – realidad, en la que los hilos, con frecuencia imperceptibles, de la corrupción, se entrecruzan en un constante ir y venir con los de una delincuencia a veces soterrada y, en algunas ocasiones, abiertamente descarada.
Por ello mismo, es que resulta perfectamente comprensible que un trabajo como el que ha hecho el periodista Calderón a través de todos estos últimos 20 años y que se describe en el libro, tenga un impacto tan insignificante en la opinión pública. A mí mismo me sorprendió encontrar expuestos en esta obra hechos de corrupción sobre los que había perdido la conciencia sobre su trascendencia nacional, como el de “Tolemaida Risorts” que, por lo visto, casi le cuesta la vida al periodista tras un atentado en el que, por lógica de las cosas, muy probablemente estaban involucrados agentes del Ejército, hechos que en otros países con una sociedad más responsable son simplemente impensables. En EE. UU., para citar solo un ejemplo, el espionaje ilegal al partido Demócrata le costó la presidencia al señor Richard Nixon. Con toda seguridad, una sanción como esa jamás se dará en Colombia.
Por razones como estas es que resulta tan importante la existencia libros en los que seres humanos con la entereza, profesionalismo y habilidad investigativa fuera de lo común, permiten a quienes estén interesados en conocer esta especie de paila del diablo que se mueve debajo de nuestros pies, tener a la mano una buena fuente de información, bien documentada y expuesta con objetividad, que ayuda a despertar las conciencias adormecidas.
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